El Tricotomismo o Tricotomía Humana (del griego Trico Tomos: Separado en Tres Partes) es la Doctrina que enseña que el ser humano completo y perfecto (Teleios) tiene 3 componentes básicos diferenciados: Cuerpo, Alma y Espíritu (en hebreo: Basar, Néfesh y Rúaj; en griego: Soma, Psiké y Pneuma; en latín: Corpus, Ánima y Spíritu).
Según los Tricotomistas, la diferencia entre Espíriru y Alma es que el primero sería la Partícula, Soplo o Esencia Divina en el hombre, mientras que el segundo estaría más cerca del cuerpo físico y el mundo material. Por ejemplo, según los Tricotomistas, los animales tienen Alma, pero no Espíritu. Los Gnósticos eran Cristianos Tricotomistas.
Fundamento bíblico
El Tricotomismo se fundamenta principalmente en este pasaje bíblico:
- «Que Dios mismo, el Dios de Paz, los santifique por completo, y conserve todo su Ser —Espíritu, Alma y Cuerpo— irreprochable para la venida de nuestro Señor Jesucristo» (Primera Carta de San Pablo a los Tesalonicenses, 5:23).
Condena eclesiástica
El Tricotomismo fue condenado como herejía por la Iglesia Católica el año 870 en el Cuarto Concilio de Constantinopla. Desde entonces, Alma y Espíritu pasaron a ser tomados como sinónimos en la religión y cultura occidental, y el Dogma oficial del Catolicismo y Cristianismo respecto a la naturaleza el hombre es el Dicotomismo o división en dos (Cuerpo y Alma/Espíritu).
Resurgimiento y evolución de la teoría
Al menos desde el Siglo 19, los esoteristas han retomado la distinción entre Alma y Espíritu, agregando además el Cuerpo Etérico, Cuerpo Astral, Cuerpo Mental y Cuerpo Causal, además del Cuerpo Físico, como Vehículos de la Conciencia o Espíritu. Sin embargo, aquí ya no se puede hablar de Tricotomismo, sino de Heptacotomismo, puesto que se habla de 7 Componentes en vez de 3.
Según estos esoteristas, los animales no tendrían Alma; o al menos, no un Alma Individual, como los humanos. En cambio, sí tendrían un Alma Grupal, como especie. Por supuesto, tampoco tendrían Espíritu. El Alma serviría como puente comunicador entre el Espíritu y el Universo Material, a través de los Cuerpos Inferiores del Ser. En el Alma, además, se guardaría el Registro de Experiencias a lo largo de las diferentes Encarnaciones del Espíritu. Ellos llaman también Budi al Alma y Atma al Espíritu. Ambas palabras son de origen sánscrito.
El esoterista argentino Nimrod de Rosario, también hace una distinción entre Alma Creada y Espíritu Increado, y afirma que no todos los seres humanos tienen Espíritu, sino sólo una minoría. Esto equivale a decir que la mayoría de los humanos son Hombres-Animales o Mujeres-Animales, y no tienen una existencia real fuera de la Creación, sino sólo una existencia ilusoria dentro de este Universo Creado, también ilusorio. Rosario llama Virya al humano que tiene Espíritu y Pasú al que no lo tiene. Ambas palabras son de origen sánscrito.
La canalizadora e investigadora Laura Knight-Jadczyk, al revés que otras fuentes, decidió llamar Alma al Espíritu, denominando Almados a quienes poseen este Componente Increado, y Desalmados o Portales Orgánicos a quienes no. Agrega que la Psicopatía y amoralidad son una características típicas de los Desalmados.
Los alienólogos italianos Corrado Malanga y Federico Bellini, conciben un Tetracotomismo o conjunto de 4 Componentes Humanos: Cuerpo, Mente, Espíritu y Alma, o Ánima. Al igual que Knight-Jadcyk, éstos decidieron llamar Alma o Ánima al Componente Increado y Espíritu al Componente Creado, afirmando que sólo un 20-25% de la Humanidad tiene el Componente Increado. Los Alienígenas que realizan Abducciones no tendrían el Componente Increado, y secuestran humanos dentro del grupo que sí tiene este Componente.